La esposa de Javier Velilla, desaparecido desde noviembre tras la avalancha La Calera, está sola, con cuatro hijos y nadie le da razón de su marido
“Yo llegué a mi casa, puse mi bolso en el sofá y de repente lo vi a él sentado en la cama, estaba con el hermano y lo regañé, le dije ‘usted dónde estaba, llevamos dos meses buscándolo, usted por qué nos hace esto, por qué le hace estos a sus hijos, no se imagina la angustia que hemos tenido todos estos días’, pero él solo se reía y de un momento a otro me desperté”.
Ese es el más reciente sueño que tuvo Luz Ángela Ríos con su esposo Javier Velilla hace tan solo unos días, pero al abrir sus ojos despertó de nuevo en la espantosa pesadilla en la que se convirtió su vida desde el pasado 12 de noviembre de 2022, cuando una avalancha, tras varias horas de intensas lluvias, arrasó con todo lo que encontró a su paso, incluso con el padre de sus hijos, quien era vigilante de un exclusivo conjunto residencial en la vía que de Bogotá comunica a La Calera y quien se encontraba realizando un recorrido en un carro por las vías internas del condominio, cuando la fuerza de la naturaleza lo sorprendió y lo volcó montaña abajo.
La voracidad de la tragedia no solo se llevó a Velilla, sino también a las ganas de vivir de Luz Ángela, quien hoy en día se mantiene única y exclusivamente de pie por sus cuatro hijos, pues no le encuentra sentido a una vida sin la presencia de quien era su esposo desde hace más de 15 años.
“Todos los días me preguntó por qué no lo abracé más fuerte, por qué no lo besé más, por qué lo dejé ir ese día que salió de la casa para ir a trabajar”, afirmó Luz Ángela entre lágrimas y con la voz entre cortada, desde el mismo punto en el que su esposo fue visto con vida por última vez.